16~


Capítulo 16:
-Jane, puedes compartir habitación con nosotras, si quieres- propuso Jess
-Oh, claro que sí -sonreí.
Las tres entramos en la habitación. Era muy espaciosa y luminosa, con las paredes pintadas de un suave color beige, y con una gran ventana que ocupaba buena parte de la pared de la izquierda, con unas excelentes vistas.
-¡Vaya! ¡Qué grande es!
Jess fue directa a la ventana.
-¡Mira! ¡Se ve el río!
Me acerqué.
-Y la piscina, ¡se ve el pueblo!
-¡Hay caramelos de limón! Mmmm.. limón -Jess cogió un caramelo que estaban en un cuenco de cerámica y se lo metió en la boca.
-¡Mirar que pedazo de armario!
-¡Me pido la cama del medio! -Jess se tumbó en ella.
-¡Yo esta! -dijo Lena, sentándose en la cama cercana al armario.
-Vale, pues yo me quedo con esta
Puse mis dos maletas sobre la cama y fui metiendo la ropa en el gran armario empotrado. Jess y Lena hicieron lo mismo.
-¿Qué tal todo?-Harry se asomó por el umbral de la puerta.
-Genial -dijimos las tres.
-Es una habitación preciosa -dije, metiendo las maletas por debajo de la cama y sonriéndole.
-Es perfecta -añadió Lena
-¿Dónde habéis comprado estos caramelos?
Harry rió.
-Es cosa de mi madre. Si necesitais algo, Zayn, Liam y yo estaremos enfrente, ¿vale?
-Perfecto.
-¡Me voy a la piscina! ¿Alguien me acompaña? -dijo Yina desde el pasillo.
-¡Yina! ¡Espera que vamos contigo! -le contestó Lena.
Rápida, Lena se quitó la pantaloneta negra y la camiseta amarilla, dejándo al descubierto un bikini amarillo chillón. Jess la imitó, llevaba un bikini azul turquesa con un corazón negro en el lado derecho del trasero. Ellen llevaba un bikini blanco y Yina llevaba uno rojo con lunares blancos. Agarraron sus respectivas toallas y salimos de la habitación, no sin que Jess coja un puñado de caramelos de limón.
Al bajar las cinco y llegar a la piscina del patio trasero de la casa, Liam, Niall, Zayn y Louis ya estaban allí, Liam y Niall en el agua jugando con una pelota hinchable de playa y Louis y Zayn estaban sentados en el suelo hablando. Jess y yo nos acercamos a ellos, mientras que las demás, se lanzaron al agua. Jess se sentó en frente suya, yo, en cambio, me quedé de pie, con los brazos cruzados y mirando sonriente cómo cogían una pelota de playa y comenzaban a jugar.
-¿No te metes, Jess? -preguntó Zayn, dando suaves palmaditas en su pierna.
-Luego me meteré, no hace demasiado calor para meterse ya.
-¿Que no? ¡Si hace casi 30 grados!
-Ya, tampoco es tanto.
-Claro, la españolita esta chuleandose de durita -Louis sonrió burlón.
-Pues claro que sí, en la tierra en la que vivía yo, podíamos llegar a los 45 grados.
-Joder -murmuró Zayn
-Lo mismo digo, en donde vivía 35 grados máximo.
-Es igual, luego ya se calentará el tiempo, sólo son las 12 de la mañana.
-¿Y tu no te metes Jane?
-No, ahora no me apetece nada. ¿Habéis visto a Harry? -miré a Louis
Negó con la cabeza, y así lo hicieron Zayn y Jess.
Me encogí de hombros y justo cuando fui a entrar en la casa, Harry, me cogió en brazos.
-Mira, hablando del rey de Roma -Jess sonrió
-¿Qué haces? -rápida, me agarré a su cuello, con miedo a caerme.
-Al agua te llevo
-¿Qué? No, no, suéltame.
Me sonrió pícaro.
Su camiseta blanca hacía que sus ojos brillaban más de lo habitual.
-Lo digo en serio, suéltame, que peso mucho.
-¿Que pesas? Por favor Jane, eres como una plumita -dijo, dando pequeños saltitos.
Me agarré más fuerte.
-Para, y suéltame.
Paró en el bordillo de la piscina.
-¿Te suelto?
-Sí, por favor
Sonrió.
-Muy bien.
Y me soltó, encima del agua, pero fui rápida. No se exáctamente cómo lo hice, pero, antes de caer, conseguí agarrar su muñeca, por lo que caímos los dos.
Al salir, le fruncí el ceño a Harry y le salpiqué, mientras que él reía.
-Me has dicho que te soltara
-Que malo eres -me pasé la mano por la cara y por el pelo.
El agua me llegaba hasta los hombros.
Me miré a mi misma. Tenía la ropa empapada, la camiseta blanca se pegaba a mi cuerpo y se me transparentaba el sujetador negro que llebaba puesto.
Harry salió del agua de un salto y se quitó la camiseta, después, se sacudió el pelo. Yo también salí del agua y Jess enseguida me lanzó una toalla
-Gracias -le susurré, sonriendo.
Ella me devolvió la sonrisa.
Harry miraba cómo me secaba.
-Esta te la devuelvo -le amenacé.
-Ah, ¿si? ¿Cómo? -sonrió pícaro
-Ya veré cómo. Pero no te saldrás con la tuya. Me vengaré.
-Eso ya lo veremos.

                                   ~

-Buenos días -dije, entrando en el comedor, sonriendo.
-Buenos días -respondieron.
Avancé y me senté en el único sitio libre, al ladon de Jess y de Niall y enfrente de Harry.
-Buenos días dormilona -Harry me sonrió.
-Tampoco es tan tarde, son las 9:30. Lo que pasa es que madrugais mucho.
-Sí, sí, cambiando de tema -Yina carraspeó -. Jane, ¿tenías algo pensado para hacer mañana?
-¿Yo? ¿Por qué?
-¡Es verdad! Mañana tu cumpleaños, Jane -canturreó Lena.
-Mierda, es cierto.... -murmuré-. Pues no, no tengo nada pensado, tampoco es tan especial, ¿no?
-Cumples 16.
-¿Y? La edad es sólo un número.
-Estoy de acuerdo, pero un cumpleaños es distinto.
-Harry tiene razón. A mi me hicieron una fista espectacular -añadió Lena.
-Vale, vale, muy bien. ¿Podemos cambiar de tema, por favor? Por ejemplo, ¿qué haremos hoy?
-Buen tema -Jess me guiñó un ojo.
-Vale, yo tengo una idea. Podemos ir hasta arriba del todo y bajar por el río, a ver hasta dónde llegamos -propuso Harry.
-¿Cómo? ¿Por el agua? -Ellen no lo pillaba.
-Sí, cogemos las zapatillas de agua y vamos bajando, es poca subida, el nacedero esta a pocos metros de aquí.
-Podría ser divertido.
-Buena idea.
-Genial. ¿A quién le toca recoger?
Yina se levantó de a mesa y observó la tabla.
-A Jess y a Zayn.
Jess soltó un resoplido.
-Quejica -murmuró Zayn al pasar por su lado, sonriendole burlón.
Ella le respondió con una mueca.

{Narra Jessica}
-Sh! Deja de mojarme y friega! -dije entre risas.
-Está bien, pero sólo por que lo pides amablemente eeh -respondió Zayn sarcástico. Me sonrió.
Puse el plato en el armario y comencé a secar los cubiertos.
-¿Qué quieres que hagamos luego? Si quieres te enseño a nadar.
-¿De verdad?
-Claro, algo tendremos que hacer, ¿no?- le sonreí
Me devolvió la sonrisa.
Los demás se habían ido hace un buen rato y nosotros dos nos habíamso quedado aquí por una simple razón: Zayn le tenía fobia al agua. Y como no sabía nadar, yo me había ofrecido voluntaria para quedarme, con la escusa que no me apetecía.
Zayn apagó el grifo y se secó las manos.
-Voy llendo, te espero allí.
-Vale.
-No tardes.
Dejé la toalla en su sitio y salí a la calle, en donde hacía sol y se podía ver un bonito y despejado cielo azul. Avancé hasta la pisina, me quité la pantaloneta vaquera y la camiseta azul, dejando el bañador azul turquesa que había llevado los anteriors días. Dejé la ropa en la silla y me senté en el suelo frio de baldosas con las piernas cruzadas. Después de unos cortos minutos de espera, Zayn apareció con el bañador puesto y con la camiseta en la mano.
-¡Sexy! -grité, después de silvar.
-¿Qué haces sentada en el suelo?
Se acercó y dejó su camiseta en la silla.
Me levanté.
-Manías mías. ¿Empezamos? -sonreí.
Él asintió, mirando al agua.
-Muy bien. Tírate. -le indiqué.
Me miró.
-¿Que me tire? ¿Y no puedo bajar las escarelitas como...?
-Te tiras o te tiro. Elige -le sonreí desafiante.
-Me tiro me tiro.
Avanzó hasta el borde de la piscina y, con ayuda de los brazos, se metió al agua.
-En fin, voy a darlo como válido, pero eso no es tirarse.
-¿Podemos dejar eso de "tirarse" para la siguiente clase? -me pudo ojitos.
Suspiré.
-Está bien, pero observa.
Me acerqué al bordillo y me tiré al agua de cabeza. Al salir a la superficie, Zayn me miraba aterrado.
-¿Por qué me miras así? -solté una pequeña carcajada- Tampoco será para tanto, ¿no?
-Me da mucho miedo que te des contra el fondo con la cabeza o algo.
-Tranquilo, no pasará.
Le sonreí. Me devolvió la sonrisa.

{Narra Jane}
-Nunca hubiera imaginado que esta agua podría estar tan fria -se quejó Lena, de nuevo.
-Tampoco esta tan fría, una vez que te acostumbras... -dijo Liam, detrás suya.
-Estoy de acuerdo, cuidado NIall, esa piedra resbala -le avisé.
-Gracias.
-¡Mirar! ¡Un cangrejo! -Harry señaló el animal escondido entre las piedras en un pozo de al lado nuestra.
Yina lanzó un chillido.
-Exagerada -murmuró Ellen.
-Joder, es grande el bicho -dijo Louis poniendose de cuclillas y mirando con los ojos entrecerrados.
-Pues yo no veo nada -dijo Lena, poniendose en la misma posición.
-¿No? A ver ahora -Liam se pudo a su lado y le dio un empujón, haciendo que Lena cayera al pozo.
Lena se frotó los ojos al salir.
-¿Ya lo ves? -Liam se reía.
-Imbécil, ya es la segunda vez que me tiras -dando zancadas en el agua y avanzando hasta él, le salpicaba con los grazos todo lo que podía, ambos riendo.
-Luego los críos somos nosotros -dije sonriendo con la situación.
Lena me sacó la lengua, yo se la devolví.
-Sigamos, ya casi hemos llegado al pueblo -Louis señaló unas casas a lo lejos.
-¡Moras! -gritó Harry
Dio unas zancadas en el agua hasta unos matorrales.
-¿Eso se come?
-Claro, mi hermana y yo nos hinchábamos a esto de pequeños -agarró uno de los pequeños frutos negros y se lo metió en la boca.
-Puaj -murmiró Yina.
-Pues yo voy a probarlo -dije, llendo con ciudado para no partirme los tobillos con alguna piedra.
Niall se acercó sin pensárselo.
-¿De verdad os vais a comer eso? -protestó otra vez Yina.
-Yo pensaba que vivías aquí, Yina -dijo Lena acercándose.
-Pues están bien ricas -dije cogiendo otra.
Louis cogió una y se acercó a Yina, que nos miraba con los brazos cruzados.
-Come -dijo, forzándole.
Ella apartó la cara como una niña pequeña, haciendo que la fruta cayera al agua.
-Vaya por Dios, ahora voy a tener que ir a por otra.
Yina andó hasta la orilla opuesta y se sentó un una piedra.
-¿De verdad no quieres, Yina? Si de pequeña te encantaban
-Tu lo has dicho, de pequeña. He madurado, al igual que mi lengua.
-Tranquila -Harry arqueó las cejas.
-Bueno, dejemoslo, que esta noche no ceno -Liam se limpió las manos en el agua.
-¿Ya? -se quejó Niall, aún masticando.
-Ya son las 12:30 pasadas y aún tenemos que comprar la cena y todo lo demás -eso último lo murmuró.
-Ah sí. "Todo lo demás" -Lena pasó por su lado sonriendo y agitando los dedos en el aire.
Carraspeé.
-Ya lo hemos hablado, nada de cosas raras -miré a Ellen
-Mierda -murmuró apartando la mirada.
-Ay Dios. ¿Qué habeis hecho?
-Nada -dijeron todos al unisono
-Algo gordo -murmuré.
-Hay que tener en cuenta -comenzó a decir Ellen-, que 16 años ya es una edad interesante y madura y..
-Anda, vámonos -la interrumpí
Cogí la última mora y con el mismo cuidado, me dirigí a Yina.
Esta se levantó y me miró sonriente.
-Tranquila, solo lo hacen para asustarte.
-Vámonos -gritó Lena, subiendo a la espalda de Liam.
-Aquí hay un atajo para ir al pueblo, hay un pequeño supermercado cerca de aquí, y hacen unas pizzas caseras buenísimas.
-¿Ya nos van a dejar entar mojados y en bañador? La ropa la hemos dejado un poco más adelante -le recordé.
-Pues vamos a por la ropa y luego vamos a comprar.
-¡Que lista eres , Lena! -Liam dio un saltito, haciendo que Lena casi se cayera.
-Como te gusta vacilarme, ¿eh?
-Mucho -sonrió.
Lena le sacó la lengua.
Yina se levantó de su piedra y se acercó a nosotros.
-Bueno, nos vamos, ¿o qué?

4 comentarios:

  1. Buahhhhhhh!!! En el próximo es el beso!!!!????? Porfa que sea en el proximo!!!! porfissssss!!!!!!!

    Tequiero Obesa xoxo

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  2. Me ha encantadoo!!
    Quiero que en el cumple se besen Harry y ella¿eeeh?
    Jijijiij,enserio me encanta,un beso(:

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  3. Hahahaha dios BUAH *____* la escena esa de andar por el rio y que luego se comen las moras me ha recordado muchísimo al camping que voy todos los veranos, esque hago exactamente lo mismo!! xDD

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